La temporada 2013 está prácticamente finalizada. Para algunos ya terminó en agosto, o incluso antes, pero aún hay muchos corredores que han seguido activos hasta octubre: Tamarite, Calatayud, Campeonato de Euskadi, G.P. Ciudad de Ourense, San Mateo, Ciempozuelos, Boadilla, Copa de Europa…
La temporada máster cada vez es más larga y exigente, lo que, salvo casos excepcionales que parecen estar a tope todo el año, obliga a planificar periodos de descanso. Uno de los más importantes es el que se realiza al finalizar la temporada.
En contra de lo que pueda parecer, desconectar de la rutina de los entrenamientos, los viajes y las competiciones puede tener efectos muy positivos sobre nuestro rendimiento de cara al próximo año. Los beneficios no son sólo físicos, sino también psicológicos: forzar demasiado la máquina puede hacernos caer en un stress que disminuya nuestra motivación y por ende nuestra capacidad física. Como decía Pispajo tras el Campeonato de España: «en el final de temporada es más importante lo que no haces, que lo que haces».
Al igual que hay que adaptar los entrenamientos a nuestra edad, forma física, disponibilidad de horarios, etc., también debemos ajustar el descanso a nuestro caso particular. En general lo recomendable es desconectar de la bici de dos a cuatro semanas. Durante estas semanas, algunos optan por no realizar en absoluto ninguna actividad física, mientras que otros aprovechan para hacer otras actividades que no pueden practicar en los periodos de preparación y competición. En cualquier caso, sea cual sea la actividad que realicemos, esta no debe exigirnos un esfuerzo físico importante. Recordad que se trata de descansar y permitir al cuerpo recuperarse de la temporada.
Este parón hará que nuestra forma física disminuya, pero es precisamente eso lo que buscamos. El cuerpo está acostumbrado al entrenamiento y tras un descanso adecuado, volverá a alcanzar el nivel que teníamos antes. Si encadenamos una temporada tras otra, acabará por acusarlo y resentirse en forma de lesiones o bajones físicos como consecuencia del sobreentrenamiento.
Mi recomendación es no parar de golpe, del mismo modo que la vuelta a los entrenamientos debe ser progresiva, la parada debe ser similar. Disputada la última carrera de la temporada iremos disminuyendo poco a poco el volumen, la intensidad y la frecuencia de los entrenamientos a lo largo de un par de semanas. A continuación realizaríamos el descanso y después retomaremos los entrenamientos comenzando por el entrenamiento de base o aeróbico y el trabajo en el gimnasio.
Por último, si sois propensos a coger peso, deberéis cuidar especialmente vuestra alimentación durante este periodo de descanso para evitar coger demasiado peso extra. Es normal e incluso positivo engordar algunos kilos, pero como todo, dentro de una moderación. Nuestro organismo está acostumbrado a un gran desgaste físico por lo que si no reducimos la ingesta de calorías, la báscula puede darnos algún susto 🙂
Así que ya sabéis. Si no queréis que os pase como a Adam Hamsen, planificad un periodo de descanso al finalizar la temporada.
Buen post Jesús Angel (como todos los que escribes), efectivamente es indispensable descansar.
Para el exclusivo método Arrautze que utilizamos por nuestras tierras yo necesito descansar al menos 2 meses en invierno, sino puedes acabar eunuco!!
A cargar las pilas y buen letargo!!
Si. La 2013 está apuntito.
David Fuentes cosas de los artículos programados, no entienden de fechas… 😊