Jesús López Doriga atropellado

El corredor del Norinver Jesús López Doriga ha sido atropellado mientras entrenaba.

Por suerte Jesús se encuentra bien y no sufrió heridas de gravedad. El atropello se produjo cuando el conductor del coche, una persona de avanzada edad, se saltó un stop y arrolló al ciclista que circulaba correctamente.

Este hecho se suma a la larga lista de atropellos y accidentes protagonizados por personas que han perdido las aptitudes mínimas necesarias para conducir vehículos a motor. Me vienen a la memoria los casos del anciano de 87 años que arrolló a un pelotón de ciclistas, otro de 82 años que mató a un ciclista en Poio, o el reciente atropello y muerte de David Herreros en Estella por otro octogenario. Como siempre, hay que recalcar que no sólo los ciclistas somos víctimas de estas personas que no reúnen las facultades necesarias para conducir vehículos a motor, también los peatones e incluso otros automovilistas sufren las consecuencias de un sistema como el de los test psicotécnicos que adolece de muchos fallos.

La picaresca de los psicotécnicos

Aquellos conductores de mayor edad o los que presentan alguna minusvalía deben superar cada cinco años un reconocimiento médico en alguno de los centros habilitados por la DGT. Aunque las normas por las que se rigen estos centros deberían ser iguales para todos, la realidad es otra, y algunos centros son más «flexibles» en la evaluación de las limitaciones de los conductores siendo, por tanto, los más buscados.

Debe existir un mayor control sobre los centros que realizan los reconocimientos médicos para detectar fraudes que ponen en peligro a todos los usuarios de las vías públicas. También debería incrementarse la frecuencia con la que se realizan estos exámenes, ya que a esas edades las condiciones de los conductores pueden degradarse rápidamente.

También debería instaurarse algún mecanismo para revalidar el permiso de conducir vehículos a motor. No es de recibo que gran parte de los conductores hayan olvidado muchas de las normas que estudiaron en su día y que jamás hayan prestado atención a las nuevas.