Imanes porta dorsales

Imanes porta dorsales

La colocación de los dorsales en el maillot llega a convertirse en todo un ritual previo a las carreras.

Creo que se puede saber como es un corredor por la forma en que fija sus dorsales con imperdibles. Los hay que apenas ponen cuatro en las esquinas, y a veces mal colocados, con lo que se suelen soltar durante la competición, impidiendo que se vea el número. Otros dejan un gran espacio libre en el dorsal, que llega a hacer de auténtico paracaídas que haría llevarse las manos a la cabeza a cualquier diseñador de bicicletas que pruebe su material en el túnel del viento y vea como su «teórica» ganancia marginal se ve totalmente  comprometida por la desidia del corredor. Por el contrario, los hay que cosen literalmente el dorsal al maillot, que termina lleno de agujeros.

Tampoco faltan las anécdotas con el uso de estos artilugios tan habituales en cualquier competición deportiva. ¿Quien no ha pinchado alguna vez un gel que se había guardado antes en el bolsillo? ¿O quien no ha cosido el bolsillo, maldiciendo su suerte cuando fue a echar mano de esa barrita energética? Algunos picotazos también  permanecen en el recuerdo un buen tiempo y es que hay algunos dorsales que parecen hechos de kevlar imposible de atravesar.

Tal vez la principal pega de los imperdibles es que, con los tejidos actuales, cada vez más finos, suelen desgarrar la tela cuando metemos las manos en los bolsillos en busca de ese plus de energía necesario durante la competición. 

Imanes al rescate

Una buena alternativa al uso de los imperdibles es el uso de imanes para sujetar los dorsales. El neodimio (Nd) es un metal que forma parte del grupo de tierras raras de la tabla periódica y que permite construir imanes muy potentes y muy pequeños, por lo que el peso es de tan sólo 2 gramos. De este modo, colocando dos chapas con polos opuestos en el exterior y el interior de nuestro maillot, podremos fijar los dorsales de forma rápida, segura y cómoda. Su potencia es tal que no hay peligro de que se suelten, incluso cuando manipulamos los bolsillos.

Olvídate de los imperdibles y pásate a los imanes porta dorsales.

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