Iñaki Villoria gana una carrera táctica en Zaratán

El corredor del Sarribikes Iñaki «Kapo» Villoria se impuso a sus compañeros de fuga con un ataque en el último kilómetro. El otro gran protagonista de la carrera fue Víctor Castro (Esteve), que estuvo escapado en solitario durante gran parte de la carrera y que finalizó tercero.

Casi un centenar de corredores se dieron cita en Zaratán, municipio del alfoz de Valladolid, en un día fresco y nublado en el que la lluvia amenazaba con hacer acto de presencia. El viento no soplaba muy fuerte, pero sí lo hacía con la suficiente intensidad como para hacer que molestase y que se agradeciese rodar a rueda de otro corredor o refugiado en el seno del pelotón.

Aunque la cifra de participantes es algo discreta, esperemos que suponga el despegue de una prueba con un recorrido muy bonito y compensado para la categoría máster.

El pelotón contó con la presencia de equipos castellanos y de las comunidades limítrofes: la sección castellana del Norinver gallego, equipos vascos como Eibartrans, Lastra Bikes, Telleriarteko, Spiuk, madrileños del Esteve, Getafe, ALG Fisio o Jiltres Desgüaces Lorenzo, asturianos como Guía Color – Inverse, Villaviciosa, o el omnipresente Vigil del C.C. Colloto, los cántabros de Unidos por un Reto y equipos de la Región como el HyD Pinturas, Ciclos García, Club Ciclista Burgalés, Más Madera, Overbike, Ribera Arroyo, C.D. Benaventano, C.D. Pisuerga…

Miguel Ángel Andrés «Miguelín» del Norinver no pudo tomar la salida porque no se había preinscrito y los jueces aplicaron a rajatabla la directiva que ya habían comunicado a lo largo de la semana: «es imprescindible preinscribirse para poder participar». Algunas de las razones esgrimidas por los jueces para justificar tal decisión es el control de los participantes, ya que aunque alguien tenga licencia, ellos no pueden saber en el momento de recoger los dorsales si sobre ese corredor pesa alguna sanción. Otro de los motivos, aunque este es de mi cosecha, es que de este modo se agiliza el proceso de las inscripciones ya que no es necesario apuntar los datos del corredor. A pesar de todo, tal vez se debería ser un poco más concescenciente y no ser tan estrictos. Después de todo, Miguelín había corrido el día anterior en Alba de Tormes, por lo que estaba claro que no pesa sobre él ninguna sanción. En descargo del corredor palentino, queda decir que sí que intentó preinscribirse, pero pensaba que el plazo finalizaba el viernes a las nueve de la mañana cuando en realidad lo hacía el jueves a las 23:59. Vaya desde aquí un pequeño tirón de orejas por no consultar esta web donde advertimos claramente del peligro de quedarse en la cuneta 🙂

Crónica

La carrera salió a las 10:30 neutralizada hasta el páramo de Wamba (se pronuncia con ‘B’, como Bamba) por lo que tanto la subida del pueblo como la siguiente hasta el páramo se hicieron detrás del coche de la organización. Creo que fue una decisión acertada, aunque en estos casos hay opiniones para todos los gustos. En cualquier caso, por delante quedaban muchos kilómetros y 5 subidas para atacar.

De salida el viento soplaba de costado pero favorable, lo que hizo que el pelotón atravesase el páramo de Wamba a toda velocidad. Había corredores que intentaban marcharse en solitario, pero era imposible dada la velocidad con la que se rodaba. El grupo permaneció compacto hasta Castrodeza, donde se produjo una fuga muy numerosa, con más de 20 corredores. Aunque en estos casos suele haber intereses muy dispares entre los fugados, lo que hace que por unos o por otros la fuga no prospere, lo cierto es que pusieron en jaque al pelotón y muchos temimos que se hubiera acabado la carrera. Sin embargo, el trabajo de Juan Carlos Domínguez, tirando de clase para recortar distancias, secundado por otros corredores animados por la cercanía del grupo cabecero, acabaron con volver a reagrupar al pelotón, cosa que sucedió en Torrecilla del Valle.

En realidad la reagrupación no fue completa, ya que a lo lejos se distinguía un corredor vestido de rojo. Se trataba de Víctor Castro «El Perdi», que este año corre en las filas del equipo Esteve. Con el viento que soplaba y con más de 60 kilómetros hasta la meta, la aventura parecía una locura.

Por detrás el pelotón marchaba a base de arreones. De vez en cuando los compañeros de Castro pasaban a la cabeza de carrera para poner algo de tranquilidad y dar oxígeno a su compañero escapado, que gozaba de una buena renta respecto al pelotón. Las subidas se hacían a un ritmo bastante contenido, ya que el viento soplaba en contra y el rebufo aportaba mucha ventaja a aquellos corredores que no destacan en las subidas. Lo peor solía venir después, ya que en los páramos el pelotón se enfilaba y había que estar muy atento para no cortarse. Creo que no dejamos ni un hierbajo en la cuneta.

Creo que fue en el páramo de Castromonte, a unos 25 km de Zaratán, donde se fraguó la fuga definitiva. En pequeños grupos o en solitario, 10 corredores lograron poner tierra de por medio respecto al pelotón. Al ya mencionado Víctor Castro se le unieron Jorge de Vicente, Álvaro Domínguez (HyD Pinturas), Juan Alberto Vigil (C.C. Colloto), Luis Vicente Aparicio (Ciclos García), Francisco Javier Torres (C.C. Getafe), Rubén de la Mata (C.C. Getafe), José Ángel Santos (HyD Pinturas), Javier Vilches (C.C. Burgalés) e Iñaki Villoria (Sarribikes).

En el pelotón ningún equipo asumió el trabajo para neutralizar la fuga, y las subidas de Peñaflor y Wamba se hicieron a un ritmo muy asequible. La cabeza de carrera ya estaba demasiado lejos como para darles alcance así que tan sólo quedaba la disputa de las primeras posiciones en las categorías máster 50 y 60.

La llegada era complicada, sobre todo porque había empezado a chispear y el suelo estaba mojado. Tras el descenso por las calles de Zaratán había que hacer un par de giros a la izquierda con piso sobre asfalto y algún paso de cebra que hace que haya que extremar la precaución. En la cabeza de carrera Villoria decidió no esperar al sprint y atacó a sus compañeros de escapada en el último kilómetro, logrando una renta de unos 5 segundos que pudo administrar hasta la línea de meta donde le siguieron muy de cerca Javier Vilches y Víctor Castro, quien a pesar de llegar con calambres lograba hacer tercero. En el sprint del pelotón José Manuel Gancedo (Guía Color – Inverse) lograba la victoria en máster 50.

La jornada finalizó con la entrega de premios, durante la cual se ofreció a corredores y acompañantes bebida y comida en el polideportivo municipal. Los premiados se llevaron para casa unos bonitos trofeos acompañados de jamones, embutidos, etc.

Álvaro Domínguez Martín (HyD Pinturas) en máster 30, Luis Vicente Aparicio (Ciclos García) en máster 40, Jesús Martín Vinuesa (Club Deportivo Tubular Bikes Ávila) en máster 50 y Antonio Gutiérrez San Félix (Club Deportivo Venteño de Ciclismo – Overbike) en máster 60, son los líderes del Trofeo Castilla y León tras las carreras disputadas este fin de semana.

Fotos

• Santiago Miñarro

Otras crónicas

• Federación de Ciclismo de Castilla y León

Clasificaciones

Clasificaciones Zaratán Montes Torozos 2017